Agua Potable
Aplicación
Se denomina agua potable o agua para el consumo humano, al agua que puede ser consumida sin restricción para beber o preparar alimentos.
Se puede producir agua potable a partir de cualquier fuente natural de agua como por ejemplo agua subterránea, lagos y ríos (agua superficial) o agua de mar.
Los parámetros del agua potable están establecidos por la Organización Mundial de la Salud o por la Unión Europea.
En la Unión Europea la normativa 98/83/EU establece valores máximos y mínimos para el contenido en minerales y diferentes iones como cloruros, nitratos, nitritos, amonio, calcio, magnesio, fosfato, arsénico, entre otros, además de los gérmenes patógenos. El pH del agua potable debe estar entre 6,5 y 8,5. Los controles sobre el agua potable suelen ser más severos que los controles aplicados sobre las aguas minerales embotelladas.
El agua destinada al consumo humano no puede contener solidos suspendidos, microorganismos y compuestos químicos tóxicos. Su composición en minerales varía dependiendo del país pero para la mayoría de los minerales existe una concentración máxima que asegura un agua equilibrada, agradable para el consumo y segura.
En las redes municipales de suministro de agua existe un especial esfuerzo en evitar la corrosión y la formación de depósitos en las cañerías de tal forma que estas se conservan en perfecto estado. Siempre que sea posible se mantienen valores de pH 8, TAC 8 y TH 8.
Para agua embotellada, el sabor puede variar de unas a otras como consecuencia de la proporción de calcio, magnesio, sulfato y hierro.